miércoles

Es un día de lluvia, quizá uno como cualquier otro para cualquier persona que piensa en uno de verano en dónde el sol irradia y luego las gotas se llevan todo lo que del día queda... Para mi, en cambio, es un tanto especial. Tuve que hacer ciertas cosas. Desde chequear un departamento para irme a vivir hasta entrevistas y locura en la linea Ex Sarmiento. Por mala suerte, en la ida me topé con Morón, me topé con Haedo, con Ramos y yo despierta, siempre recordando, siempre viva y presente mi memoria. Ya para la vuelta tan resignada y cansada estaba que me decidí por dormir y no ver, no recordar, no memorizar, ni pensar y así como la las gotas se llevan todo lo que fué del día pretendo que también se lleven lo que fué conmigo, lo que fué de mi todo este tiempo.
Estoy buscando eso que me purifique y me llene y me llegue y me haga sentirme viva, plena, roja, radiante. Estoy en plena búsqueda, en pleno encuentro, acierto y desacierto, esto llegando, yendo, viniendo y haciendo...Siempre constante, siempre cayendo, siempre levantando, siempre logrando...
Las nubes no se ven grises, se ven amarillentas, el día está anaranjado, tempestivo y bastante nostálgico. Hay veces que no puedo ni conmigo, ni con mi genio. MENOS cuando me veo envuelta en horas que no vuelven...
Todo lo que tengo de adelanto lo tengo también de atraso y testarudez, todo, todo.
A eso que fuí se impone fuertemente lo que soy, es un tire y afloje consante pero propio (entiendo por fin lo dulce de la palabra propio sin que suene a 'adueñarse' a 'poseer celosamente') por lo que en parte me reconforta en la misma medida que me agota pensar/re.pensar las cosas.

'Puedo ver y y decir y sentir: Algo ha cambiado'

No hay comentarios:

Publicar un comentario